Escuela de padres

Reportajes

Los vecinos de Silla disponen desde hace 4 años de un servicio de asesoramiento en la difícil tarea de la educación de sus hijos

Cuando una persona se enfrenta a la aventura de ser padre le asaltan multitud de dudas sobre la educación del niño. ¿Lo estaré haciendo bien? ¿Estaré siendo demasiado duro con mi hijo? ¿Le estoy permitiendo demasiado? ¿Cómo puedo eliminar los celos entre hermanos? ¿Cómo lo motivo para que quiera ir al colegio? Para solucionar este tipo de interrogantes el ayuntamiento de Silla dispone desde hace cuatro años de una escuela de padres.

El curso está dividido en tres bloques. El primero consiste en analizar el modelo de familia que se tiene y decidir cuáles son los objetivos que queremos conseguir. Las relaciones familiares han cambiado mucho en los últimos años. Si las dudas de las que hablábamos antes asaltaban fundamentalmente a padres, actualmente muchos de los alumnos que esta escuela recibe son abuelos, sobre todo en los casos de núcleos familiares donde los progenitores están separados. ‘Tanto el padre como la madre suelen trabajar y son los abuelos los que pasan más tiempo con los niños por lo que se convierten en piezas clave a la hora de educar’, comenta Rosa Vidal psicóloga y directora del proyecto.

El perfil de gente que acude a las clases de ‘escuela de padres’ que se celebran en el Colegio Reyes Católicos es gente joven e inexperta. Sin embargo, cada vez más están recibiendo asesoramiento educativo para sus niños, además de los abuelos, parejas del padre o de la madre que entran a formar parte del núcleo familiar tras la separación de uno de los progenitores. Una de las consecuencias de esta transformación en el tipo de alumno ha sido la del cambio de nombre del curso por ‘escuela de familia’. La concejal de Educación del ayuntamiento de Silla, Ana Manrique, lo justifica explicando que la nueva denominación pretende ‘incluir a todos los responsables de la educación de los niños’.

La comunicación es otro de los temas importantes a la hora de formar. Hay que saber cómo explicar las cosas al niño y conseguir que nuestro discurso sea coherente con nuestros actos. Una de las alumnas, Eloísa Sensión, explica que para castigar a su hija la dejaba sin ver la televisión pero que en otras ocasiones en las que a ella le venía bien que su niña estuviera distraída se lo permitía más tiempo del debido. ‘Sólo después de acudir a las clases me dí cuenta de que estaba cometiendo un error’, reconoce.  

Por último, hay que hacer cumplir el proyecto que hemos ideado previamente. Para ello es importante ejecutar uno de los derechos y a la vez obligaciones de los padres como es la autoridad. Según Rosa Vidal, este es uno de los aspectos que más les cuesta porque ‘les recuerda a otra época’. ‘La razón puede deberse a la evolución de las familias desde un modelo anterior con un autoritarismo excesivo, pero hay que mantener cierta autoridad sobre el hijo porque si se aplica bien es bueno para él’, comenta la directora.

Las nuevas tecnologías y los videojuegos son también foco de preocupaciones. En el caso de los últimos, encontramos ejemplos de familias que, incluso con problemas en la economía familiar, compran a los niños el último modelo de videoconsola. Asumen que no es bueno para sus hijos pasar demasiado tiempo delante de la pantalla pero, a su vez, el horario marcado para su utilización no se cumple en muchos casos por culpa de los propios padres. El curso ayuda a corregir estos malos hábitos.

Otro de los miedos es el fácil y cada vez más temprano acceso de los jóvenes a las redes sociales. Es un problema que suele darse en el momento en el que el niño se encuentra en el proceso de transición a la vida adulta y que se mezcla con la enorme cantidad de cambios que sufre durante este tiempo. En estos casos se recomienda  que los educadores conozcan el funcionamiento de las redes para así poder orientar a sus hijos en su utilización y evitar problemas.

A pesar de lo expuesto, los expertos coinciden en que no existen fórmulas mágicas ni generales puesto que cada familia tiene problemas distintos con soluciones diferentes. Sin embargo, gracias a iniciativas como ésta se hace más fácil la tarea más difícil para los padres, educar a sus hijos.

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