Roberto y Erundina se conocieron hace más de 50 años gracias al baile y hoy siguen compartiendo esa afición
Roberto Esteve y Erundina Tomás son dos vecinos de Alfafar que con 84 años él y 80 ella continúan participando en concursos de baile. Al primero al que asistieron fue en el año 91, cuando ganaron el campeonato autonómico en Gandía. El último, en Aldaia el pasado 14 de abril donde quedaron en la sexta posición entre más de 60 parejas de toda la comarca.
A Roberto la afición le viene desde la juventud. ‘Fui a ver una película de Fred Astaire y Ginger Rogers y les vi bailar “La cumparsita” y me enamoré del baile, a partir de ese momento empecé a interesarme por esta afición’, nos comenta. De hecho, la coreografía con la que han ganado decenas de concursos está inspirada en la de Astaire y Rogers. Gracias a sus dotes de bailarín conquistó a Erundina.
La única comisión fallera que hace 50 años se plantaba en Benetússer celebraba un baile. En casa de Erundina todos estaban un poco resfriados y nadie tenía ganas de salir. Unas amigas la convencieron para acudir al baile. ‘Vinieron dos chicos a pedirme que bailara con ellos y les dije que no. Entonces vino Roberto y bailamos. Nos salió perfecto’, recuerda Erundina. Antes la tradición marcaba que al finalizar los bailes se subastaban ramos de flores. Los chicos pujaban por ellos para regalárselos a las mozas. ‘Roberto se gastó el sueldo de toda una semana de trabajo para comprarme el ramo’ recuerda entre sonrisas ella. Cerraron el baile y luego se fueron cada uno a su casa.
Por la cabeza de los dos pasó durante los días posteriores lo emocionante que había sido bailar juntos aquella tarde. Pocos días después se volvieron a ver por casualidad cerca de casa de Erundina. Roberto se quedó un buen rato esperándola en la puerta hasta que la vio salir y pudo hablar con ella. Así empezó, esta bonita historia de amor que ha tenido como fruto 3 hijos, 5 nietos y 2 bisnietos.
Desde entonces no se han vuelto a separar. Ella durante muchos años fue cajera de una famosa carnicería de Benetússer. Él, encargado de una empresa de fabricación de mueble auxiliar en la misma localidad. A pesar de ser unos enamorados del baile, durante muchos años no tuvieron demasiado tiempo para poder disfrutar de su gran pasión. ‘Había que trabajar para sacar adelante la familia y quedaba poco tiempo para dedicarlo a las aficiones. Sólo bailábamos en las bodas’, nos cuenta Roberto.
Ha sido a partir del año 91, coincidiendo con la jubilación de Roberto, cuando de verdad han podido disfrutar de su hobby. Ese año se presentaron a su primer concurso y sin haber pisado nunca una academia se clasificaron para participar en el campeonato autonómico que se celebró en Gandía. Como no podía ser de otra manera, lo ganaron. Todavía conservan la grabación de esa competición y de vez en cuando se la ponen y recuerdan su éxito. ‘Nuestro hijo nos la ha pasado a DVD porque si no ahora ya no la podríamos ver’, nos cuenta Erundina.
Han estado de viaje con el Imserso en muchas ciudades de España y en todas han participado en diferentes competiciones. La pareja cuenta que en algunos sitios les han reconocido después de tres o cuatro años sin verse gracias a que se acordaban de sus coreografías. ‘Hay gente que cuando nos ve nada más llegar nos pregunta, vosotros sois los del tango no?’ Además, todos los viernes acuden al Hogar del jubilado de Alfafar y los sábados al de Sedaví para compartir con sus amigos un ratito haciendo lo que más les gusta, bailar.
Su modalidad favorita es el tango. Roberto nos explica que lo que ellos bailan no es el clásico tango argentino sino que se trata de una adaptación. ’Una vez en una competición, se nos acercó una persona y nos comentó que lo que nosotros bailábamos era tango europeo y no argentino. Nosotros no sabemos mucho porque no hemos ido a clase nunca. Montamos la coreografía basándonos en la película’, nos aclara.
Su coreografía la mantienen fija para los concursos. Durante su actuación, hay un momento especialmente emotivo para ellos que es cuando Roberto coge a Erundina de la cintura y ligeramente inclinados le besa. ‘Nadie se lo espera y por eso que la gente se sorprende mucho cuando lo ve y lo aplaude muchísimo’, nos dice Erundina. El aplauso les carga de energía y les anima a continuar con el espectáculo.
Su canción favorita es “Tu Carta” de Manolo Escobar, porque les encanta la letra. Cuenta la historia de dos enamorados que rompen su relación a través de una carta. Ella le dice a él que ya no le quiere y que en ‘su ausencia ha conocido a otro amor’. Desde luego, el baile nunca va a estar ausente de las vidas de Roberto y Erundina por lo que será imposible que conozcan otro ‘amor’ que les separe de esta afición que tanto les ha unido.
Publicado en el periódico Valencia Express el viernes 20 de mayo de 2011